Soy Escritora

Desde la primera persona, la escritora empedernida, Luciana Rocchetti , nos convida este maravilloso texto en el cual relata el arduo trabajo que es escribir.

(Por Luciana Rocchetti)

Soy escritora, porque no lo pude decir antes, me parecía mucho, demasiado. Y si bien, a los quince años empecé con este oficio, me gusta decir que comencé desde que nací, ya que cuando esto paso no sabía hablar. No obstante, cree un mundo en mi cabeza. Soy escritora, ya que no sé hacer nada más; no me gustaría, porque escribo desde el fondo de mis entrañas, ahí brotan mis palabras como la primavera que se abre en una hoja, como el baile que hago con las manos cuando creo. Soy escritora, poeta, porque escribí dos libros; el primero no me gusto tanto el segundo sí, ahora voy por el tercero y espero que cuando termine, jamás pierda la chispa de crear, ese hambre que nunca te da de comer, pero no busco ese tipo de comida, esta no sirve para saciarme. Soy escritora porque no baje los brazos, cuando redacté lo mejor de mí y no hubo ventas, pero no me importó. Aún sigo escribiendo, me encargo de hacerlo todos los días 8 horas. Escribo enojada, feliz, triste, confundida y en todos los estados posibles. A veces, me pregunto ¿por qué decidí esta vocación tan complicada? Tal vez, es porque jamás termine de crear ese mundo que estaba en mi cabeza cuando no sabía hablar, quizás es porque el camino hacia la habitación de la computadora ya está en mi, ya es mi naturaleza. Soy escritora, porque disfruto entregar al mar libros, sin esperar nada. La verdad es que lo hago para mi, sin objetivo alguno. Y, si lo cierto es que debería tomarme vacaciones, pero no puedo, no quiero. Soy escritora porque no me importan los números de Instagram, pero si me importa no copiar la misma fórmula de algunos que dicen tener esta profesión y no son más que un copiar y pegar de Pinterest. Soy escritora porque como un arquitecto le gusta diseñar casas, o un ingeniero se dedica a resolver los problemas de la mejor manera posible para mejorar el funcionamiento de las cosas. Como un agrónomo que camina todos los días hectáreas y hectáreas para ver si hay malezas; yo escribo, leo y releo y vuelvo a escribir para corregir, que el texto tenga cohesión y coherencia. Porque la materia prima son las palabras, que escriben poesías, cuentos y novelas. Soy escritora porque cuando creo un libro, es la misma sensación que amar a alguien ya que es dar sin recibir nada a cambio. Solo aguardar al lector perfecto.