Por el concejal de La Libertad Avanza, José Guarch.
Lo que pasó con la confitería de la Laguna Mulitas , en el estado que se encuentra, con un deterioro que no se debe solo al pasar del tiempo, existiendo abandono, con una similitud increíble con la maquinaria vial ,camiones y demás bienes del municipio, deja a las claras que, un Estado más pequeño que se encargue de lo esencial dejando a los privados participar, haría una gestión más ágil y económica.
De ser así, los cambios de gobiernos no serían tan traumáticos como lo estamos viviendo. Ningún servicio se interrumpe solo, cambiaria el firmante del pago.
A tener en cuenta:
Nadie mejor que el dueño para cuidar un bien, porque cuando se manejan fondos públicos (de terceros) salvo excepciones, se malgastan.
Los políticos tradicionales se arrogan la capacidad de saber y hacer todo. Nadie mejor que uno sabe de sus preferencias.
Estoy planteado otro punto de vista, para cuidar el dinero de los contribuyentes que en definitiva son los que pagan los malos manejos de los políticos. Muchas situaciones que veo en lo público son inadmisible en el sector privado.