Afecta en gran parte al sector rural. El legilador argumentó que es una alícuota que solo pagan los bonaerenses porque no existe en otras provincias
El diputado provincial que responde al espacio de Lilita Carrió, Luciano Bugallo, presentó un proyecto de ley para derogar un impuesto perjudicial para el campo. Se trata del impuesto a la herencia, que traería un alivio para el sector rural.
Bugallo argumentó que es una alícuota que solo pagan los bonaerenses porque no existe en otras provincias. Al mismo tiempo, el espacio de la Colisión Cívica fundamentó que la derogación permitirá incentivar las inversiones y revitalizar las economías regionales.
Impuesto a la herencia
Para el diputado bonaerense, el impuesto es injusto e injustificable. Esta ley se sancionó en 2011 durante la gestión de Daniel Scioli.
“El tributo viola el derecho de propiedad y la libre disposición del derecho real de dominio, lo cual posee jerarquía constitucional y muy específicamente a su regulación en el Código Civil de la Nación”, sostuvo el legislador, al mismo tiempo que lo calificó como inconstitucional.
Además, Bugallo comentó que este impuesto tiene una vinculación estrecha con el sector rural. “La derogación del impuesto traerá algo de alivio al campo, ya que les permitirá contar con un mayor flujo de efectivo y reinvertir en sus tierras y negocios”, agregó.
El referente de la Coalición Cívica remarcó que la derogación permitirá a los agricultores y ganaderos competir de manera más justa con otros países, porque en su mayoría no existe, lo que resultará en una mayor rentabilidad en los productos del sector rural. “Esto, a su vez, generará mayores ingresos para los productores y una mayor contribución al crecimiento económico del país”, destacó.
Por otra parte, el legislador sostuvo que la medida debe ser vista como una señal positiva para la baja de impuestos, libertad individual y el respeto al derecho de propiedad. En este punto, fundamentó que el impuesto impacta indudablemente sobre las familias en razón de que no se trata de bienes recibidos sin esfuerzo, sino de bienes que ya eran gozados por la familia del transmitente, por lo que resulta nulo el crecimiento patrimonial.
“En la provincia hay miles de sucesiones sin terminar, herederos sin poder disponer libremente de sus bienes, sobre todo familias de pequeños y medianos productores, porque se les hace imposible pagar el impuesto a la herencia, debiendo recurrir, en la mayoría de los casos, a la venta de parte de la herencia para poder afrontar los costos, esto es inaceptable, sobre todo, que son propiedades que a su vez han estado tributando el Impuesto a los Bienes Personales”, concluyó Bugallo.
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