La llorona: “Volví a llorar porque en 25 no hay un sánguche de milanesa que te llene el alma”

El mítico personaje charló con 25 se informa pasando la Rotonda de la conocida Mulita, cerca de la quinta de Tariano Muya. “Ya nadie hace uno completo, con queso, jamón, lechuga, tomate, cebolla, aceitunas y panceta”, declaró afligida

La Llorona de 25 una vez más apareció, pero esta vez a lágrima viva. El tema es un plato típico: “Volví a llorar porque en 25 no hay un sánguche de milanesa que te llene el alma”.

Al respecto, mientras se levantaba de un porrazo que se había pegado culpa de una intempestiva helada, nos comentó que “ya nadie hace hace uno completo, con queso, jamón, lechuga, tomate, cebolla, aceitunas y panceta”. Manifestación con tono apenado.

“Ando por 25 y no hay oferta de uno súper con adereza”, dice, porque ella cree que la palabra aderezo no existe. “Con bayonesss, tosmaza y chuker”, agrega la pilla.

Acto seguido, lloró nuevamente: “buaaaaaaaaaaaaaa, buaaaaaaaaaaaaaaa, lloro como lo dice la RAE”. Pero nosotros le indicamos que el llanto escrito no tiene potencia alguna.

“Estoy apenosa y llorosa. Volveré a sollozar, pero esta vez lo haré enmotorizada”, habla para el traste debido a mocos y a un pedazo de sábana de su atuendo que se acaba de tragar. “Vendí unos bitcoins y me voy a comprar una Siam Ditella 1500 con cilindro auxiliar de embrague, y me van a ver. Además, no pago patente. Ahh, y dejen de joder con el surubilo; no existe”.

Fue lo último que dijo. De repente, se cayó en una zanja, se llenó de barro, se incorporó acomplejada, se subió a una mamá carpincho que pasaba y no la vimos más.