Ruta 51 de 25 a Chivilcoy: el tramo letal

(Por Leo Baldo)

– Sabés que te podrías haber muerto esta tarde.

– ¿Por qué decís eso?

-Porque viajaste des Chivilcoy a 25 por la Ruta 51. Le tengo terror.

Eso que se lee ahí arriba podría ser, más que verosímil, verdadero, pero es una ficción anticipada.

Lo de letal, en ese título, prefigura lo que puede pasar en breve en una ruta que es desatendida desde hace años y que forma parte del corredor cerealero. Es simple, el camión cargado que viene desde la zona núcleo va hasta el Puerto de Quequén o de Bahía Blanca. Los camiones.

Ojo, no me venga con el tren de cargas. Seamos realistas. No es posible. No está en nuestra carne, lo dejamos ir.

También me va a decir que en este país hay demás prioridades, y es cierto, más allá de que se pueda pensar que el significante (palabra) ruta pueda remitirnos a los significados de trabajo, desarrollo o economía pujante. Pero nadie gana dinero si es que se mata en un accidente. Sería el caso.

Recorrido propio ante declaraciones de diferentes políticos en campaña:

Aníbal Fernández, en el 2015, tenía que hablar en Tapalqué de la Ruta 40. Tenía un libreto preparado porque era el tema de interés de muchas personas de la sección. Desconocía el derrotero.

María Eugenia Vidal, ya gobernadora, y muy entrenada como Aníbal, tenía ese mismo libreto. Lo desconocía.

Todo lo que menciono acá arriba lo sé por observación permanente de cronista. Y lo sé porque somos quienes asesoramos a funcionarios y muchas veces escribimos esos libretos. Lo hago hace mucho.

Decir no es hacer.

Otro: cuando a 25 de Mayo vino el exministro de transporte Dietrich, me contesta que el desarrollo se veía en las rutas. Acá hablamos de una provincial. Hay nacionales estrechas y hechas bolsa.

Y hay que decir:

La última persona que arregla el tramo de la 51 entre 25 y Chivilcoy, fue el entonces gobernador Felipe Solá. Puro parche. ¿Lo habrá hecho porque tiene campo en Ugarte? No sea cosa de que un funcionario se mire el ombligo como hondo lugar para su beneficio (?).

La cuestión acá es que dicho tramo está hecho pelota. Durante la gestión de Ralinqueo, que tenía vía directa con Axel, nada se hizo. De todas maneras, pensar que los colores partidarios de un municipio tienen más acceso al color partidario de arriba, es matar la política y alejarse de la acción de golpear esa puerta necesaria. No responsabilizo al exintendente.

Por otra parte, ediles de Juntos sacaron un petitorio en Google para la refacción de la misma. Hasta ahora no pasó nada. No responsabilizo a los ediles y exediles de juntos.

Tal vez nos quepa a nosotros. Estamos vivos y, como ciudadanos tenemos el derecho a reclamar. Es así de fácil.

Los testimonios sobre la peligrosidad del trayecto son varios.

Esta mañana una docente que desconoce el tramo, agradecía haber llegado con vida a Chivilcoy mientras transitaba la ruta con niebla.

Un productor agropecuario ayer salvó su vida al romper una de sus cubiertas por uno de los pozos.

Ni hablemos de cuando llueve: auaplaning. Vehículo haciendo sapito como piedra sobre la superficie de una laguna.

Ni hablar de nuestra cultura agraria: la ruta es estrecha y las máquinas por ahí tienen que ir. No responsabilizo a los productores o trabajadores rurales.

Creo que agregar más ya sería tautológico – decir mucho para decir nada-.

Comentanos si la transitaste y qué se debería hacer.

Mientras tanto, pido, en esta nota que firmo, que vialidad y la dirigencia política toda, que tanto declama federalismo cuando no existe, que, por favor, arreglen ese tramo.

En breve, en un accidente en la 51, nos podemos morir.

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