La salud mental comunitaria, un tema que urge, un tema de todos, un tema del que hay que hablar

(Editorial)

Los datos mundiales sobre salud mental nos aportan una perspectiva alarmante desde el punto de vista sanitario y social. 25 de Mayo, así como otros municipios y lugares del país, no están aislados.

Según los estudios de la Confederación de salud mental de España, a nivel global podemos encontrarnos con los siguientes parámetros:

-1 de cada 4 personas tendrán un trastorno mental a lo largo de su vida.

-Entre el 30 y el 50 % de estos trastornos no reciben ningún tratamiento a día de hoy.

-El 12,5 % de todos los problemas de salud está representado por los trastornos mentales, una cifra mayor a la del cáncer y los problemas cardiovasculares.

-450 millones de personas en todo el mundo se verán afectadas por un problema de la salud mental que dificulta gravemente su vida.

-Un 1 % de la población mundial desarrollará alguna forma de esquizofrenia a lo largo de su vida.

-El 50% de los problemas de salud mental en adultos comienzan antes de los 14 años, y el 75% antes de los 18.

-Más de 300 millones de personas en el mundo viven con una depresión, un problema de salud mental que ha aumentado un 18,4% entre 2005 y 2015.

-Cerca de 800.000 personas se suicidan cada año, siendo la segunda causa de muerte en personas de 15 a 29 años.

El presente contexto y el aumento de la ansiedad, la depresión y demás problemáticas evidentes en esta etapa pueden estar ligadas a la enajenación/alienación. Es decir, la extrañeza de nuestra propia identidad, la fragmentación del sujeto y la pérdida de sentido vital dentro de la maquinaria.

Actualmente, para el filósofo Byung Chul Han los dispositivos de poder y la mercantilización del individuo nos llevan a percibirnos como objetos. El cuerpo como empresa. No paramos. No nos detenemos a decir lo que sentimos. La tristeza y el dolor son parte de la vida. El derecho a estar mal es salud. Alguien siempre nos escucha. Prevenir, anticiparse.

Ojo al piojo. Que la depresión y demás diagnósticos mentales no sean parte del consumo, sino que tienen que ser vistos como lo que son: enfermedades. Y nadie zafa de ellas.

Vamos a parar las cosas en conjunto.

Porque que asistimos a diario a problemas y retos que nos generan angustia, depresión, ansiedad u estrés y no solo desde un punto de vista teórico o filosófico precisamente. Es real y la realidad es que se sale, también.

IMPORTANTE:

La salud mental comunitaria es un tema de todos. El abrazo es necesario, el llanto, la palabra hablada y escrita, la música, bailar. Decir, expresarnos las veces que consideremos necesarias.

No guardarse nada. Crear encuentros, armar talleres de arte, frecuentar instituciones, hacer deportes, caminar en la naturaleza, escuchar, agradecer. A pesar de que a veces nos sintamos aislados y que nadie nos entienda, se trata de ser y de sernos. Se trata de la comunidad.

Por último, dejamos un par de citas para pensar. Corresponden al filósofo francés Gilles Deleuze que bien abordó este tema.

El arte es lo que resiste: resiste a la muerte, a la servidumbre, a la infamia, a la vergüenza.

Se carece de oídos para escuchar aquello a lo cual no se tiene acceso desde la vivencia.

Se nos enseña que las empresas tienen un alma, lo cual es sin duda la noticia más terrorífica del mundo.

Se escribe siempre para dar vida, para liberar la vida allí donde esté presa, para trazar líneas de fuga.

La emoción es creadora, en primer lugar, porque expresa la creación entera; en segundo lugar, porque crea la obra en la que se expresa; y finalmente, porque comunica a los espectadores u oyentes un poco de esa creatividad.

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